Los yihadistas eliminan ejemplos de arte asirio de valor incalculable
No es suficiente con destruir restos artísticos y arqueológicos de un valor incalculable. También es necesario grabar la escena y difundirla. ISIS ha hecho pedazos la mayor parte de los fondos del Museo de Nínive, en la ciudad iraquí de Mosul. Un vídeo de cinco minutos muestra a los miembros del autodenominado Estado Islámico lanzando las estatuas contra el suelo o pulverizándolas a golpe de maza. En ocasiones, utilizan una radial para borrar los rostros de las estatuas asirias del siglo IX AC. Otros elementos del fondo del museo se remontan al siglo VII AC.
¿Originales o réplicas?
La facilidad con que se rompen al caer al suelo y las barras de hierro que sobresalen de su interior hacen pensar que se trata de réplicas de escayola. Ese no es el caso de las obras de mayor tamaño, como la figura de la foto superior, que sí son piezas originales.
Sin embargo, Eleanor Robson, historiadora y presidenta del Instituto Británico para el Estudio de Irak, que confiaba en que pocas obras originales se hubieran visto afectadas, comentó después que, tras observar varias veces las imágenes, era más pesimista. Las barras de hierro también se utilizan con originales para ensamblar figuras que fueron desenterradas en su tiempo separadas en varios trozos. Los relieves colgados en las paredes son probablemente réplicas.
La dificultad de valorar estos daños sólo a partir de unas imágenes aumenta por el hecho de que el vídeo difundido por el ISIS incluye planos que no corresponden al museo de Mosul. Robson indica que también hay imágenes de las excavaciones de Hatra y del Museo de la Puerta de Nergal, que está en Nínive. En el caso de las estatuas destruidas de Hatra, es probable que sean originales, según Robson.
Vendidas en el mercado negro
Un centenar de objetos procedentes de Siria se ha vendido en el Reino Unido en beneficio del ISIS, según The Times, que se ha puesto en contacto con expertos en arte robado y arqueólogos. El periódico destaca que en su mayor parte se trata de piezas de valor y tamaño medianos: monedas bizantinas de oro y plata u objetos decorativos. Es difícil que lleguen a Londres piezas de mayor tamaño y valor por la dificultad de mantener las transacciones en secreto.
Según Robert Jenrick, diputado conservador y exdirector de la sala de subastas Christie’s, se trata de la mayor amenaza a la cultura desde la Segunda Guerra Mundial y también una importante fuente de ingresos para ISIS y el régimen de Asad».